El uso del cepillo dental es tu primera e insustituible opción para cuidar de tu sonrisa, otros métodos suplementan al cepillo, pero NO lo sustituyen. Los mecanismos bucales de autolimpieza NO tienen efecto importante sobre la formación de la biopelícula.
Por ello, el cepillado dental es el pilar fundamental de tu higiene oral, ya que con el uso del cepillo en intervalos regulares mantendrás a tus dientes libres de biopelícula dental. Con ello, te mantendrás libres de gingivitis, y de padecer de mal aliento.
La importancia del uso del cepillo dental.
Además de los cepillos, es importante utilizar hilo dental o cepillos interproximales para obtener una higiene más completa. Por último, lo ideal es finalizar este proceso empleando un irrigador dental.
Características de un buen cepillo dental
Un mango lo suficientemente extenso y con buen agarre es una de las principales características de un buen cepillo. Tanto mejor si la cabeza del cepillo está dispuesta en ángulo, es decir, contorneada y de tamaño pequeña o mediana para tu comodidad.
Preferiblemente cerdas suaves.
Las cerdas del cepillo dental
Las cerdas del son quizá el componente más estudiado, específicamente su diseño, que es lo que podría tener algún impacto en la eficacia del cepillado. Dicha eficacia que se traduce en una mayor facilidad para limpiar ciertas zonas, como las áreas linguales y posteriores de tus dientes, así como sus caras vecinas (interproximales).
La importancia del uso del cepillo dental.
Algunos estudios in vitro sugieren que las cerdas más ahusadas tienen mayor eficacia en la remoción de la biopelícula. Si los filamentos de las cerdas son rígidas, podrían tener un potencial traumático durante tu cepillado, aúnque esto aún no está del todo claro. De hecho, hoy en día la mayoría de los cepillos a la venta son de cerdas suaves (tienen menor diámetro y algún grado de pulido en sus terminaciones).
El cepillado dental es sensible a la técnica de quien la ejecuta, es decir, dependiendo de la mano que use el cepillo serán los resultados que verás. Así, lo más recomendable es que sea el dentista quién explique a cada persona las técnicas de cepillado que debe emplear.
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